Chambers es la nueva producción de Netflix con la que apuesta nuevamente al género de terror. Luego del éxito de The haunting of Hill house, la plataforma produjo una nueva serie que se estrenará el 26 de abril y contará con 10 capítulos para esta primer temporada.
La historia sucede en Arizona y se centra en Sasha Yazzie, una joven nativo americana, de 17 años que sufre un ataque cardíaco y debe ser trasplantada de urgencia. Su nuevo corazón pertenece a una hermosa adolescente, reina del baile, típica "girl next door". Los sucesos macabros comienzan luego de que nuestra protagonista entabla relación con la familia de su donante y empieza a experimentar situaciones extrañas, como sueños vividos, visiones y comportamientos ajenos a ella.
Cada vez son más las estrellas del cine que apuestan a las proyectos originales de Netflix, Renée Zellweger es la última en incorporarse a una producción que se estrenará en Mayo. Chambers no se quedó atrás, cuenta con la participación de Uma Thurman, la “Chica Tarantino” conocida por interpretar a “La novia” en Kill Bill o como Mia Wallace en Pulp Fiction. Encarnará a la madre de la donante, que luego desarrollara una relación especial con Sasha Yazzie. También cuenta con la actuación, del actor Tony Goldwyn, conocido por el papel de Fitzgerald Grant en la serie de Shonda Rhimes, Scandal. En la ficción formará pareja con Uma Thurman , juntos serán la familia Lefevre.
La protagonista junto al resto del elenco son jóvenes actores que no tienen mucha experiencia en la pantalla. Sasha Yazzie interpretada por Sivan Alyra Rose, conocida modelo nativo americana se dedica a la actuación hace pocos años y solo participó en un par de cortometrajes independientes. Su donante, Becky Lefevre, encarnada por Lilliya Reed, su último trabajo fue en la película Viena and the Fantomes protagonizada por Dakotta Fanning. A su vez, forman parte del elenco Nicholas Galitzine que representa a Elliot Lefevre, hermano gemelo de Becky; Kyanna Simone Simpson, Lilli Kay, Sarah Mezzanotte, Marcus Lavoy y Griffin Powel- Arcand.
Su creadora Leah Rachel comentó que se trata de "una historia de terror psicológica que explora las diferentes maneras de metabolizar un trauma. Pero lo que comienza como una historia humana fundamentada, eventualmente se convierte en algo mucho más extraño y jodido de lo que se esperaba". Ésto podría relacionarse a los síntomas psicológicos que padecen los pacientes de trasplantes luego de la intervención. Según Psicólogos a algunos de los trasplantados les cuesta asimilar la despedida de su órgano y la incorporación de otro que consideran extraño, lo que lleva a rechazos corporales y trastornos disociativos.
La película que toma la misma temática es The hands of Orlac (1924) que trata sobre un pianista que tras un accidente le trasplantan las manos de un asesino, y comienza a comete homicidios, de igual manera El ojo del mal (2008) pero con la aparición de espíritus y demonios. Otra que se asemejó al género terror psicológico y, en especifico, a aspectos psicológicos reales, fue Awake (Bajo Anestesia) 2007, un joven despierta durante su operación y comienza a percibir todo lo que los médicos le hacen a su cuerpo. Este fenómeno se denomina “percepción intraoperativa”, es cuando el paciente de una cirugía, aunque no pueda moverse ni hablar, no ha perdido los sentidos del tacto, ni el oído, por lo que puede sentir todo el proceso.
Quizás tomando como referencia la declaración de la creadora, Chambers sea la representación visual de una joven que sufre episodios de psicosis, por las alucinaciones visuales y auditivas que la protagonista experimenta a lo largo de la serie, debido al trauma que genera una operación de semejante envergadura. A estos episodios esquizofrénicos se le podría sumar la hipótesis de que el corazón tiene memoria.
Según reportó el neuropsicólogo de la Universidad de Hawai, Paul Pearsall, el corazón es cinco mil veces más poderoso que el cerebro, y a lo largo de su estudio, detalló el particular caso de un americano que recibió el corazón de un suicida y se mató trece años después, de la misma forma que lo hizo el donante. Además, se supo que tras la operación había buscado a la familia para agradecerles el órgano y termina casándose con la viuda del anterior propietario de su corazón.
Por otro lado, está la historia de la actriz francesa Charlotte Valandrey quien a los 34 años debió someterse a un trasplante de corazón. Al poco tiempo, comenzó a experimentar cambios en sus gustos, tener dejavus sobre lugares y cosas que nunca había hecho, y a tener pesadillas vividas. En sus sueños ocurría un accidente automovilístico mientras llovía y ella se veía toda ensangrentada. Luego Valandrey, conoce a su pareja y deja de tener pesadillas, pero al año descubre que su novio era el viudo de su donadora.
Estos hechos se podrían relacionar a lo que vive la protagonista de Chambers, quien siente la necesidad de entablar una relación con la familia y el entorno de su donante; y además, poco después comenzar con los síntomas del trastorno disociativo y cambios de personalidad, que en la serie se muestran como sucesos paranormales.
Chambers asegura un proyecto que sigue con la línea de las nuevas producciones de terror psicológico a partir de la crítica y análisis de trastornos humanos y sociológicos, dándole un twist retorcido para generar el pánico en los espectadores. Ya quedó atrás la necesidad de mostrar sangre y tripas, o temáticas demoníacas como en The evil dead (1981), y tampoco en centrarse en la familia de asesinos psicópatas como con los Robeson en The people under the stairs (1991) o la familia Sawyer, de la realidad llevada al cine en The Texas Chainsaw Massacre (1974). Un nuevo formato del género de terror acaparó las pantallas y parece ser la nueva receta del éxito.
POR: Ro García
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